Aluvión: vecinos temen que el río Taquiña se lleve sus casas otra vez

en Los Tiempos el 10-09-20 07:15

Después de dos aluviones, en 2018 y 2020, la familias de la Taquiña aún viven en vilo con el temor de que un día el río se lleve sus casas otra vez o, peor aún, más vidas. Y es que, a seis meses del último desastre, los trabajos son mínimos frente a la gran amenaza: el deslizamiento del Linkupata.

La más reciente inspección a la cuenca Taquiña, donde está el cerro Linkupata, constató que a lo largo del río el paso del agua está bloqueado por rocas, que superan el tamaño de una persona, que incluso pasaron inexplicablemente por un cañadón estrecho. Otras formaron un dique creando una laguna.

La Gobernación pidió calma. Sostiene que el deslizamiento en Linkupata en este periodo seco es mínimo, según una inspección de agosto. 

“Son deslizamientos desestabilizados en 2018 y que, si bien han sufrido remoción, no representan peligro alguno”, explicó el secretario de la Madre Tierra de la Gobernación, Alan Lisperguer.

Sin embargo, “pueden activarse si no se regula el cauce en cabeceras de la quebrada Cara del Indio”. 

Los vecinos consideran que el riesgo persiste. “En la parte alta hay más resquebrajamiento del terreno; más aún, donde hay filtraciones y cualquier cantidad de rocas”, explicó el presidente de la OTB Molle Molle Noroeste, Cristóbal Burgos.

El dirigente de una de las zonas más golpeadas en los aluviones dijo que la preocupación es que en la época de lluvia el deslizamiento pueda agravarse por el agua y la pendiente, porque no hay ni un disipador o colmatador, que sirva para amortiguar la caída del agua. 

Otra vecina de Thika Khatu, Alicia Aguilar, alertó sobre la falta de trabajos en el río y del r...