Persiste desinformación sobre vacunas en Cuba

en El Diario el 23-04-21 05:53

La Habana (Cuba).- Hace poco una vecina de 89 años de edad me comentó que la habían vacunado contra Covid-19 y afirmó que le pusieron una inyección, aunque no sabe de qué trata la medida del Gobierno para combatir la enfermedad.

Supone que a mí no me visitaron porque de momento se está inmunizando a los mayores de 80 años. Y es que la mayor parte de la población cubana carece de información sobre las vacunas contra el SARS-CoV-2, los protocolos de un ensayo clínico y los derechos de sus participantes.

Nadie desconoce que la Covid-19 puede causar síntomas y secuelas graves, e incluso la muerte. Pero muchos cubanos ignoran que una de las medidas para protegernos es la vacunación. Así como algunas personas se han dejado inyectar sin saber con qué, no pocos se niegan a recibir la vacuna incluso cuando concluyan los estudios. “Que vayan a inyectar a la madre de Díaz-Canel”, exclamó un joven en el policlínico.

La primera vez que alguien se infecta con el SARS-CoV-2 (el virus que causa la Covid-19) su cuerpo puede demorar en desarrollar los anticuerpos necesarios para vencer la infección. Después, su sistema inmunitario recuerda cómo proteger al organismo si se repite el contagio. Las vacunas “enseñan” a nuestro organismo a identificar y destruir una proteína exclusiva del SARS-CoV-2, de modo que si ocurre el contagio nuestro cuerpo pueda combatir mejor la infección.

Las vacunas contra la Covid-19 se basan en investigación y tecnología que ha existido por décadas. Se ha estudiado a muchos miles de personas, y esto ha posibilitado que las vacunas se desarrollen con relativa rapidez. En el mundo existen ya varios tipos de vacunas autorizadas contra este virus. Ninguna de ellas puede causar la enfermedad.

El desarrollo de una vacuna comienza por estudios de laboratorio y en animales (estudios preclínicos). En la fase I de los ensayos clínicos la vacuna candidata se estudia en humanos po...