Erick Nijland, ejemplo de esfuerzo y perseverancia

en Los Tiempos el 04-04-21 08:29

Nadie es profeta en su tierra y prueba irrefutable de ese adagio es el éxito que ha cosechado el ciclista Erick Nijland fuera de su país de origen: Holanda.

También dicen “la tercera es la vencida”, y esa frase también se acomoda a la perfección al ciclista de 64 años, pues en su tercera incursión a nuestro país (2018) determinó echar raíces y adquirir la nacionalidad boliviana.

Hace días enarboló la tricolor tras pulverizar el récord de la hora en la categoría Master D1 que ostentaba desde hace 30 años el otrora y extinto pedalista paceño Rubén Martínez. El velódromo Edgar Cueto fue testigo de la proeza del atleta, quien a bordo de su bicicleta de fabricación italiana sacó chispas a la deteriorada pista del escenario deportivo de la zona de Chimba.

“Mi esposa Kathia y yo éramos colegas de trabajo hace muchos años y ‘cupido’ nos unió definitivamente hace siete años (2013). Decidí naturalizarme porque vivo con mucha satisfacción en Cochabamba”, rememora vehementemente Nijland, quien en diciembre del año pasado, a horas de la Navidad, recibió los documentos que lo declaraban ciudadano boliviano.

Erick lleva montando una bicicleta desde hace 58 años y en todo ese tiempo ha vencido innumerables obstáculos con tal de continuar ejercitándose en el deporte que le apasiona. Cuando tenía seis años compitió por primera vez en una carrera en Neede, pueblo natal de sus padres, situado en una zona rural de Holanda.

“Recién cuando tenía 31 años pude comprar una bicicleta de ruta con mi primer salario. Lo gracioso es que aún conservo esa bici, puesto que la utilicé en el velódromo de Alto Irpavi (1991-1994), cuando vivía en La Paz. Recuerdo que cuando radicaba en Hond...